Nació en Braga Portugal. Desde peque lo recogió el Arzobispo el cual le dio estudios y lo preparó para ser sacerdote. Una vez que se ordena le dan la abadía de San Pelayo por su prudencia y responsabilidad. Sirve en la abadía ayudando al pueblo y a los pobres de este, más su gran sueño es visitar otos lugares santos y conocer sus monumentos. Por lo que deja a un sobrino en su cargo y se va a contemplar los sitios sagrados para dar culto a Dios. Regresa a los catorce años descubriendo que su sobrino se ha convertido en un tirano que somete a las gentes. Entonces intenta recuperar su cargo, pero le es imposible. por lo que decide anunciar el evangelio desde fuera en los alrededores. Hace una pequeña ermita a las afueras y se hace ermitaño. Pronto tiene que compaginar sus idas de oratorio con la predicación a los que acuden a pedir consejo. Dicen que ayudó a construir un puente y con el permiso del prelado siguió sus días en el oratorio ayudando a los habitantes del lugar. Cuentan que la Virgen se le aparecía y que cuando se acercaba al rio, los peces saltaban a sus manos como ofrendas para el Señor.
Murió en 1260 victima de una grave enfermedad, dicen las leyendas que en los brazos de la Virgen.
Fue beatificado por el Papa Pío IV en el año 1560.
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