NATURALEZA. De la mano de Dios Padre.

He pensado que no vendría mal ir incluyendo en este blog vídeos de animales. ¿A quien le gustan los animales? ¿ Y los documentales de animales? A los mayores, a algunos, nos encantan. Pero para los más jóvenes, a no ser que te gusten mucho, mucho los animales, resultan ser un poquito largos y terminas por no verlos. ¿Y sabes lo que pasa cuando no ves un documental? Pues que sueles perderte cosas bellas de la naturaleza que Dios Padre ha creado para nosotros.

¿Seguro que has visto alguna de las películas de tiburón? Eso quiere decir que no eres tan pequeño. Eh!

Has visto como en la peli el malo es el tiburón que se come a todo el mundo. Pero la verdad es que los tiburones no actúan así, son peligrosos, pero Dios los ha preparado de ese modo para que coman peces grandes del mar y el océano no se llene de peces. ¿Te imaginas que fueras a bañarte a la playa y el agua tuviese muchos , muchos peces, pues no podríamos bañarnos, ¿verdád? Los tiburones y otros peces de cualidades parecidas, ayudan al equilibrio natural de la naturaleza marina. Pero también tienen otra cara,tal vez menos conocida.

A mi siempre me gustaron los tiburones desde pequeñita, me parecían animales muy fuertes y eso me encantaba. 

Pues bien, mira el vídeo que te pongo a continuación y veras como te gusta y te sorprende. 

Y si por el contrario eres de l@s que te gustan los delfines, aquí te dejo un vídeo precioso de ellos. A mi hija Lucía les encantan.

¿Sabias que a los delfines le llaman los ángeles del mar? Pues si. Son animales muy, muy inteligente y se relacionan muy bien con las personas. En este vídeo podéis verlos actuar casi en estado de libertad. Es muy relajante. Un poco largito, porque dura diez minutillos, pero ya verás como te gusta. 

Espero que te haya gustado y sobre todo descubras que bonitas son todas las criaturas de Dios. Tenemos que ayudar a conservar la naturaleza, porque el hombre en las últimas décadas, no se está portando muy bien y hay muchos animales que ya no existen por culpa del hombre y otros muchos que están en peligro de extinción, vamos que quedan muy poquitos. Así que hay que colaborar en todo lo que podamos para salvar la obra de Dios.