HAWOLLEEN DESDE LA FE.

     Quienes somos madres católicas, llegadas esta fechas tenemos un combate especial con las fiestas. Para nosotros llega el día de Todos los santos y el día de recordar a nuestros difuntos. Una fiesta aquí en España arraigada. Sin embargo con la secularización y adoptar como nuestras costumbres de otros lugares, las celebraciones como son Halloween comienzan a desbancar las propias. Ya no solo a nivel de fiestas nacionales, también las relacionadas con la propias de la fe o nuestra moral de creencias. 

A mi personalmente no me ha gustado nunca la fiesta de halloween. Cuando era joven, ya mis amigos comenzaban a celebrarla en la discotecas y los locales de ambientes. Yo nunca me identifiqué con esta celebración. Como es de esperar ahora que soy madre me gusta aún menos. Lo que ocurre es que es muy difícil cuando tenemos hijos pequeños como en mi caso, explicarle el verdadero sentido de esta fiesta pagana. Yo lo hago, pero ellos lo entienden con ciertas limitaciones, es más, en el colegio, en su grupo de amiguitos, todos celebran con ilusión halloween y ellos no quieren ser menos. Hoy venían contando que han estado dibujando en el colegio calabazas de halloween, ¿como controlar eso? Tampoco creo que sea bueno el negarse a que nuestros hijos participen. Yo he adoptado otra postura. La de intentar desde el seno familiar fomentar la fiesta pero de cara a la fe. Recalcándole a los niños que la verdadera fiesta es la de recordar que la santidad es alcanzable, que se puede hacer el bien y que otras personas lo han conseguido antes. Los santos. Para ellos hacemos diferentes actividades de manualidades y coloreamos, desde el año pasado me vuelco más en ello, este tengo pensado hacer con ellos algunos santos de cartón recortado que ya enseñaré. 

     Como el tiempo este año está de lluvia, nos va a acompañar en estos dos próximos días para desarrollar más actividades manuales en casa. Como por ejemplo la imagen de esta entrada que vi en el blog de Eva de MI BLOG DE RELIGION (4º) Vi la imagen de las calabazas talladas con motivos religiosos y me han gustado mucho, así que posiblemente hagamos una para celebrar el día de difuntos y poner como lampara lucernario a nuestros familiares.

     Hay muchas ideas con las que si nos esforzamos un poco, podemos dar un sentido religioso a esta fiesta y con ello no tener que privar a nuestros peques, ni forzar una situación de rechazo rotundo. Vivimos en el mundo y debemos ser astutos como serpientes dice el evangelio. Podemos capear el temporal y sacar siempre una parte positiva y fiel a nuestra fe. Y lo más importante, que nuestros pequeños conozcan nuestras costumbres y nuestras creencias con hábitos sencillos y que les gusten y no como imposiciones, creo que a la larga eso da mejores resultados.