Nació sobre el 1575 al 1580. Hijo de un noble castellano, siempre rehusó de ser alguien importante. Estudio jurídica y filosofia y ya de joven trabajaba dando clases en Barcelona (España).
Ingresó en los dominicos cuando volvió de Bolia, donde trabajaba como jurídico el dinero que ganaba lo invertía en los pobres y hacer en obras buenas. Al regresar al España entra en la orden de los dominicos.
Fue confesor del rey Santiago de Aragón y cuentan que este no permitía a las embarcaciones salir en la expedición a la isla de Mallorca. Raimundo para mostrar que estaba en desacuerdo tiró su manto sobre el agua y viajó sobre el hasta Barcelona. Esta es una de las hazañas por las que más se le reconoce aunque su trabajo fue grande en el derecho canónigo escribiendo y profundizando sobre el misterio del sacramento de la confesión. Escribió grandes obra de teologia moral y derecho, entre ellas la Summa casuum que explica como utilizar bien el sacramento de la penitencia.
Cuando envejeció renunció a sus cargos y pudo pasar sus últimos años haciendo lo que más le gustaba, enseñar. Se dedicó a la pastoral y a dar clases. Murió casi con 100 años, Dios se lo llevó sin padecer martirio.
El 29 de abril de 1601, fue canonizado por el entonces Papa Clemente VIII.
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